Muchas veces, las fiestas infantiles pueden ser maravillosas para los niños y un dolor de cabeza para el que la planifica.
Simplifica las cosas creando un tema de fiesta para brindar un interés instantáneo, prepara el entretenimiento y establece algunas reglas estrictas para facilitarte las cosas
Fija un tiempo para que la fiesta comience y termine. Si elijes tener la fiesta después de la escuela un viernes, asegurate que los niños van a estar lo suficientemente cansados para dormir al final de la noche en lugar de permanecer despiertos toda la noche.
Las carpas que se encuentran en el patio trasero, son una aventura para las fiestas de tus hijos, y también ahorrandineroa. Solo asegúrate de tener a mano muchos bocadillos y bebidas, muchos botes de basura tambien. Compra un montón de linternas en una tienda de todo por un dólar (las linternas son buenas para jugar, así como para encontrar el camino al baño en medio de la noche) y deja que los pequeños compañeros se las lleven a casa después de la fiesta.
Otra sugerencia útil es tener películas adicionales y palomitas de maíz a mano en caso de lluvia, o demasiadas historias espeluznantes para entretener a los niños.
Tanto para ti como para los padres de los niños que asisten a las fiestas de tus hijos, establece un horario para apagar las luces y apégate a ellas. A nadie le gusta recoger a un niño malhumorado que ha estado despierto toda la noche y, aunque puede que no sea popular entre los niños, será apreciado por los padres.
Tene un montón de alimentos para el desayuno a mano la noche anterior, para que los madrugadores puedan servirse solos. Las buenas opciones son pequeñas cajas de cereales, frutas, magdalenas, panecillos y una variedad de leche y jugos. ¡Planear por adelantado y utilizar estos consejos útiles garantizará que todos disfruten de las fiestas de cumpleaños de sus hijos!